Chief compliance officer
En un mundo empresarial en constante cambio, donde la globalización, la complejidad y la tecnología avanzan de forma frenética, las empresas se enfrentan a multitud de retos legales y regulatorios. En este contexto, la figura del Compliance Officer, como profesional clave para mantener el orden dentro de la organización, resulta vital.
El Compliance Officer, también conocido como Chief Compliance Officer, aparece en este contexto no como un mero observador pasivo del cumplimiento normativo, sino como un actor proactivo que diseña, implementa y supervisa programas integrales para garantizar que las actividades de la empresa se ajustan a la legalidad vigente. Su labor resulta fundamental para proteger la reputación de las empresas, prevenir sanciones legales, promover una cultura ética y responsable y asegurar el éxito a largo plazo de la organización.
Qué es un Compliance Officer:
El Compliance Officer es un profesional estratégico que contribuye a la toma de decisiones informadas identificando y evaluando riesgos legales y regulatorios que pudieran afectar a la empresa. A través del conocimiento de las leyes y la regulación aplicable, el Compliance Officer implementa políticas internas que aseguran el cumplimiento normativo. Por ello, esta figura ha de ser una figura independiente y neutral dentro de la organización para mantener la integridad de esta. Además, su conocimiento del ámbito normativo permite a la organización anticiparse a posibles cambios legales y adaptar su estrategia de negocio en consecuencia.
A estos efectos, la formación del Compliance Officer no se puede limitar al ámbito legal, sino que debe poseerhabilidades en áreas como la ética empresarial, la gestión del riesgo, la comunicación o la gestión de proyectos entre otros. Por tanto, un Compliance Officer es quien asegura el cumplimiento de los requisitos legales, así como de los estatutos internos de la empresa, tratando de controlar de forma interna los riesgos a los que se enfrenta la organización. Asimismo, resulta esencial que el Compliance Officer cuente con medidas disciplinarias para evitar una reincidencia en caso de infracción regulatoria.
Muchas empresas optan porque sea el asesor general quien desempeñe las funciones del Compliance Officer al entender que el cumplimiento normativo es en definitiva un asunto legal. A este respecto, la Circular 1/2016 de la Fiscalía General del Estado establece que el Compliance Officer ha de tomar parte del órgano de la entidad cuando esta sea de pequeñas dimensiones para garantizar que este se encuentre familiarizado con las prácticas de la empresa. Por ello, en estos casos es el Órgano de la Administración de la empresa el que asume el rol de Compliance Officer.
Funciones de un Compliance Officer
El Compliance Officer ejerce diferentes funciones en el seno de la empresa al objeto de asegurar una conducta ética y el cumplimiento normativo de la misma. Además, es quien se encarga de, tanto la elaboración como la actualización de políticas y procedimientos internos, que habrán de ser comunicados al conjunto de los miembros de la organización y actualizados de forma periódica. Para ello, el Compliance Officer debe ser capaz de identificar amenazas de incumplimiento y tomar medidas para aliviar estos.
Por ello, el Compliance Officer habrá de ser quien evalúe regularmente el cumplimiento de las políticas y procedimientos establecidos a través de auditorías internas e informes periódicos que informan sobre el estado del cumplimiento normativo. Para ello, lo primero que debe realizar es identificar posibles riesgos normativos a los que la empresa pudiera quedar expuesta al objeto de implementar medidas que pudiera mitigar los riesgos.
A estos efectos, y para que el conjunto de integrantes de la empresa se conciencie sobre la importancia de esta cuestión, se deben llevar a cabo funciones de capacitación y concienciación para que estos comprendan la importancia de la figura del Compliance y del cumplimiento normativo. Asimismo, debe comunicar de forma periódica los requisitos emanados de la ley, así como los cambios y las medidas que se deben adoptar para adaptarse al cumplimiento normativo.
Por último, las acciones llevadas a cabo deben tener un reporte y de detectarse incumplimientos normativos se han de aportar las medidas necesarias para revertir la situación. Esto, puede suponer la implementación de medidas disciplinarias y la adopción de acciones correctivas que prevengan futuros incumplimientos.
En definitiva, el Compliance Officer será el encargado de promover el cumplimiento de las normas y que sea una conducta ética la que rija la forma en la que las organizaciones lleven a cabo sus negocios.
Empleo del Compliance Officer
El empleo de este tipo de perfiles requiere de unos conocimientos y una preparación específica. Muchas veces se parte de una educación en derecho para posteriormente a través de estudios de postgrado específicos especializarse en la materia. Dichos conocimientos debieran ampliarse con conocimientos en áreas concretas, por ejemplo, a través de certificados concretos en áreas especializadas.
Además, debe tener conocimiento regulatorio actualizado, ya que esto resulta vital para mitigar los riesgos a los que se enfrenta la empresa. Asimismo, deberán tener conocimiento de las prácticas regulatorias relacionadas con el sector financiero. En este aspecto las habilidades analíticas y la gestión de la organización se configuran como esenciales para garantizar el cumplimiento empresarial.
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Respecto a las habilidades que se requieren para ser un buen Compliance Officer resulta fundamental que este tenga altos estándares éticos, ya que será el responsable de trasladar dichos estándares a la organización. Por ello, debe mostrar un compromiso con la política de la empresa y que sea visto como un referente dentro de la propia organización. Asimismo, se requieren habilidades de pensamiento crítico y comunicación para identificar los riesgos a los que pueda enfrentarse la compañía, evaluar las fortalezas y debilidades de esta y en virtud del análisis realizado adoptar aquellas medidas que resulten más eficientes. Por ello, un buen Compliance Officer debe contar con las habilidades necesarias para resolver los problemas más complejos, analizar los mismos y desarrollar soluciones efectivas que sirvan realmente para mitigar los riesgos.
El papel del compliance officer
En conclusión, el papel del Compliance Officer resulta vital en el contexto actual, especialmente en un entorno empresarial dinámico y globalizado. No solo a los efectos de garantizar el cumplimiento normativo, sino también para proteger la empresa, prevenir sanciones legales y fomentar la cultura ética de la empresa resulta esencial contar con esta figura . A través de su conocimiento de las leyes y regulaciones aplicables, implementa y supervisa políticas internas para mitigar riesgos legales y regulatorios.
El rol del Compliance Officer pasa por identificar las amenazas, realizar auditorías internas y capacitar al personal, asegurando así el alineamiento de la organización con los estándares legales y éticos. La independencia y neutralidad son cruciales para mantener la integridad de la empresa, y su formación debe abarcar diversas áreas, incluyendo ética empresarial, gestión de riesgos y comunicación.
Por todo ello, el Compliance Officer resulta esencial para el éxito sostenible y ético de las organizaciones en el largo plazo.
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